Señor presidente del Partido Popular, le escuchamos, certero, en la denuncia de los mundos sutiles, ingrávidos y gentiles, como pompas de jabón, que canta Serrat y dibujan los escenógrafos de Moncloa para mejor halagar a Pedro Sánchez, pero, parece inválido a la hora de formular propuestas que liberen al PP de cargar con las culpas de una parálisis, dañina para todos, y que articulen el discurso del método para acordar lo imprescindible, sin renunciar a la lucidez ni dejar de discrepar de lo que sea menester, ni confundir la velocidad con el tocino.
«Estamos trabajando intensamente en investigar y poder desarrollar tratamientos cada vez más precisos y personalizados: terapias únicas, con nombres y apellidos, que ayuden a…