Señor presidente del Instituto Nacional de Estadística, el progreso de las ciencias es paralelo al de los instrumentos de observación. Ahora se ha optado por practicar test del coronavirus de forma aleatoria a una muestra representativa de la población, para obtener un reflejo del alcance exacto de la pandemia.
Porque una de las principales confusiones que padecemos deriva de la falta de un sistema aceptado por todos, que permita comparar de manera homogénea las cifras de contagiados, de recuperados o de muertos, sabiendo que se han contado de la misma manera.