Señor portavoz del Vaticano, después de que el nuncio Renzo Fratini abandonara Madrid tildando de error la pretensión del Gobierno Sánchez de exhumar los restos de Franco de la basílica del Valle de los Caídos, llega su desautorización oficial reiterando el respeto a la soberanía del Estado español y a su sistema legal.
Mejor hubiera sido que acogieran a Franco en la cripta de San Pedro como hijo fidelísimo de la Iglesia, que declaró la guerra civil como Cruzada y mantuvo al Caudillo bajo palio.