Tanto que el propio presidente Joe Biden ha dicho que el asunto será de vida o muerte mientras que la alcaldesa de Tampa, Jane Castor ha advertido, según reporte del colega Manuel Somoza, que “si eligen quedarse en una de las zonas de evacuación, morirán”.
Tétrico el panorama. No aconsejable para un festejo de cumpleaños, y sí para tomar cuanta precaución sea posible y pedirle clemencia al santo de preferencia.
En La Habana la televisión no cesa de colocar el spot de estar atentos a las informaciones de la Defensa Civil. Y más surrealista hay que mandarlo a hacer: que se limpien los tragantes cuando en cada esquina de la ciudad las montañas de basura impiden que tan solo una gota de agua pueda ser engullida por el alcantarillado. Es que ya, ahora mismo, hay inundaciones.
Nos espera un jueves negro. La gente aquí en tensión por la suerte de la parentela que vive en Miami y Tampa. Nada, que estaremos a merced de la descomunal fuerza de la madre naturaleza.