“El pasado 23 de julio, la sociedad española lanzó un mensaje de enorme valor simbólico y también de gran alcance europeo”, ha afirmado Sánchez en un acto en Madrid junto a eurodiputados socialistas. Según ha explicado, la ciudadanía transmitió con su voto “que la ultraderecha no es imparable, que se puede frenar a la ultraderecha”. “A pesar de que la derecha tradicional haya claudicado y se haya sometido a la ultraderecha –en alusión al PP-, dijeron que es posible otro camino, es posible otro futuro”.
Tal y como ha vaticinado, Pedro Sánchez habrá un nuevo Gobierno progresista pronto. “Dentro de poco tiempo”, ha asegurado ante unos socialistas a los que ha invitado “a asistir en tiempo real a la consumación de la derrota de la propuesta reaccionaria de PP y Vox en las Cortes”. Una derrota, ha continuado, que “tuvo su expresión electoral el 23 de julio y esta semana se consumará en el parlamento”.
El líder del PSOE ha roto así el silencio que ha guardado durante los dos días de la sesión de investidura de Feijóo, en la que renunció intervenir, desmontando al PP. En su lugar, el Partido Socialista designó al exalcalde de Valladolid Óscar Puente para dar la réplica al presidente de los populares.
La ‘hoja de ruta’ de Sánchez y los suyos pasa ahora por esperar a la citada derrota parlamentaria de este viernes de Feijóo, ante la que el Rey deberá convocar una nueva ronda de consultas. Entre medias, y con la vista puesta en que se celebre otro debate de investidura la segunda quincena de octubre, el PSOE intensificará las negociaciones con otros grupos para sumar los apoyos necesarios.