La Inspección Nacional de Regulación Nuclear de Ucrania ha señalado en un comunicado publicado en su página web que las instalaciones de Zaporiyia “han sido tomadas por las fuerzas militares de Rusia” y ha agregado que por ahora no hay informaciones sobre muertos y heridos.
Así, según recoge Europa Press, ha destacado que “el personal sigue en sus puestos de trabajo, con personal operativo supervisando el estado de las unidades de generación y garantizando que operan en línea con los requisitos de procedimiento para unas operaciones seguras”. “Se están llevando a cabo revisiones para identificar cualquier daño material en el lugar”, ha afirmado
Asimismo, el organismo ha informado que el reactor uno “está apagado”, mientras que el dos y la tres han sido desconectados de la red y se está llevando a cabo el proceso de enfriamiento de las instalaciones nucleares. “La unidad cuatro está operativa a 690 megavatios, las unidades cinco y seis están siendo enfriadas”, ha apuntado, al tiempo que ha remarcado en que “no se han registrado cambios en la situación de radiación”.
La Inspección Nacional de Regulación Nuclear ha hecho hincapié en que el proceso de enfriamiento “está garantizado por el diseño de los sistemas de las unidades, en línea con los requisitos de procedimiento para operaciones seguras”. “La pérdida de la posibilidad de enfriar el “combustible nuclear llevaría a una liberación significativa de radiación al medio ambiente, ha detallado.
En esta línea, ha avisado de que “una situación así podría superar todos los accidentes previos en centrales nucleares, incluido el accidente de Chernóbil y el de Fukushima Daiichi”. “Debe recordarse que, además de las seis unidades, hay una instalación de almacenamiento de combustible nuclear utilizado que, de sufrir daños por los ataques, liberaría radiación”, ha zanjado.