Sánchez, desde la tribuna de oradores, ha defendido que para que la economía mantenga su rumbo España necesita superar el reto demográfico. Algo de lo que no se libra ningún país desarrollado y que pasa por fomentar la natalidad. Ante esto, ha adelantado en las próximas semanas los partidos del Gobierno de coalición tratarán de alcanzar un acuerdo con los grupos de esta Cámara para aprobar una nueva ley de familias para ampliar los derechos de las familias monoparentales, las familias numerosas, las familias migrantes y aquellas familias que tengan algún miembro con discapacidad.
Para superar este reto demográfico hay que abordar también el fenómeno migratorio. En este sentido, ha puesto sobre la mesa algunos de los desafíos a los que hay que plantar cara. En primer lugar, gestionar los picos de migración irregular que se producen en función de la coyuntura nacional e internacional. A esto se une, según Sánchez, la integración, así como la desinformación que se crea en torno a las migraciones.
Frente a esto, el jefe del Ejecutivo ha avanzado que se van a agilizar la homologación de títulos académicos de aquellas personas que quieran venir a trabajar un tiempo a España. También el mes que viene Moncloa llevará al Consejo de Ministros una reforma del Reglamento de Extranjería que agilizará los procesos de los migrantes que ya residen en España, eliminando trámites burocráticos innecesarios, ordenando las figuras de arraigo, y creando nuevas figuras entorno al empleo y las redes familiares.
Adelantar la entrada en vigor del Pacto de Migración y Asilo
Respecto a Europa, el Gobierno va a pedir a la Comisión Europea que adelante la entrada en vigor del Pacto de Migración y Asilo impulsado bajo la presidencia española el año pasado, de modo que sus herramientas de control fronterizo y reparto de personas migrantes empiecen a usarse en el verano de 2025 y no el verano de 2026, como está previsto.
Junto a esto, Pedro Sánchez ha explicado que otro de los ejes de acción del Ejecutivo será impulsar la integración de los migrantes que se instalan en España. Por ello, en las próximas semanas pondrá en marcha un plan nacional de integración y convivencia intercultural.
“Los españoles somos hijos de la migración, no seremos padres de la xenofobia”, ha defendido el presidente, quien ha llamado a hacer una política migratoria “de la que nuestros mayores puedan sentirse orgullosos”. Y hagamos una política migratoria que garantice el futuro de sus nietos.
