En España, que ocupa la novena posición de ranking, la producción de vehículos cerró 2021 con una caída del 7,5% respecto a 2020, un ejercicio en el que las unidades producidas se vieron afectadas por los parones de las fábricas a causa de la pandemia.
El descenso de la producción, que viene motivado principalmente por la crisis de los microchips y el contexto de incertidumbre económica, es todavía mayor -llega al 25,6%- frente a 2019.
Esta situación no solo afectó a las fábricas españolas, sino que el resto de los países europeos tampoco pudo dar respuesta a la demanda de vehículos a causa del desabastecimiento de microchips. De hecho, la fabricación en la UE de los 27 cayó un 5,6%. Sin embargo, otros países pudieron elevar la producción de vehículos pese a la crisis de semiconductores y de la cadena de suministro.
Según los datos de la Organización Internacional de Constructores de Automóviles (OICA), los dos mayores productores, China y EEUU, aumentaron en un 3,4% y un 3,9% respectivamente la fabricación de coches. Aunque el mayor incremento tuvo lugar en India, con un 30,1%.