La CEOE recibió el año pasado un total de 7,66 millones de euros en subvenciones públicas, lo que supone un incremento del 23,9% con respecto a los 6,18 millones de 2011, según figura en el informe de cuentas anuales auditadas de la patronal. La cifra representa un 33,7% de sus ingresos.
Mi jefe dice que este hecho tiene muy poca lectura: que al Gobierno le debe de parecer muy bien lo que hace la CEOE y que, aunque existe alguna que otra justificación a tamaña subida (cogida un poco con pinzas), no hay duda de que a los del PP les cae bastante mejor un empresario que un sindicalista. Pese a todo el discurso de la austeridad y tal.
Claro que hay un matiz importante en esta ecuación. Ninguno de los líderes de las grandes centrales sindicales se encuentra en el trullo y, sin embargo, el antiguo líder de la clase empresarial, Gerardo Díaz Ferrán, se encuentra a la sombra. Y no precisamente por haber aparcado mal la bicicleta.
