La multimillonaria pensión de Aurelio Izquierdo, ex presidente de Banco de Valencia, ex director general de Bancaja y actualmente director financiero de la caja valenciana, ha desatado tal polémica que el directivo tiene muy pocas opciones de llegar a ver ni un céntimo de los 13,9 millones de euros que se había asegurado.
Según recuerdan algunos observadores del mercado, mejor hubiera sido para él haber sabido retirarse a tiempo y cobrar su pensión en Bancaja después de que el Banco de España interviniera Banco de Valencia y él perdiera su puesto al frente de la entidad. En ese momento, aunque hubiese existido polémica, habría sido menor. Sin embargo, decidió reintegrarse en la caja valenciana de la mano de José Luis Olivas, y la nacionalización de Bankia ha puesto ahora en el ojo del huracán su pensión.
Izquierdo ha tenido unos últimos años de trabajo frenético. Desde 2007 fue la mano derecha de Olivas como director general de Bancaja, puesto que dejó para asumir el de director general de Negocio de Bankia en junio de 2011. En octubre de ese mismo año, dejó la entidad que reside Rodrigo Rato para dirigir el Banco de Valencia, primero como consejero delegado y luego como presidente, hasta la intervención de la entidad por el Banco de España en noviembre.
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ya ha transmitido al Gobierno que el director financiero de Bancaja, Aurelio Izquierdo, no podrá ejercer sus derechos de pensión acumulados cuando deje la entidad.
