Esta sección ha dedicado muchas líneas a echar unas risas a cuentas de ladrones tontos, tontos y con muy poca ciencia para delinquir, pero hoy vamos a hablar de unos amantes de lo ajeno muy especiales, que han demostrado tener un curioso sentido de la responsabilidad.
Les cuento. Resulta que dos individuos, uno de ellos menor de edad, entraron a robar en una casa de Delhi, en California y entre el botín se llevaron una caja de 50 cd que pensaron estarían en blanco, pero para su sorpresa cuando los revisaron se encontraron con centenares de fotos comprometida: habían entrado en casa de un pederasta. Al parecer, según informó la CNN, la víctima del robo, Kraig Stockard, de 54 años, tenía en los discos que le fueron sustraídos una serie de imágenes pornográficas de niños y cuando los ‘cacos’ las vieron, decidieron entregarlas a la Policía y denunciar al dueño, aun a riesgo de recibir el castigo correspondiente por el robo.
Cuando los agentes llegaron a la casa de la víctima del robo se encontraron con tres ordenadores y otros tantos portátiles, así como numerosos discos duros en los que había miles de fotografías y películas de pornografía infantil.
De acuerdo con la investigación policial, el tal Stockard había estado almacenando todas estas imágenes durante siete años. Lógicamente, el pedófilo fue inmediatamente puesto a disposición judicial al igual que los dos ladrones, aunque no se sabe si el juez tendrá en cuenta el hecho de que ellos mismos facilitaran su detención para desvelar la actividad ilícita de su víctima. Yo voto porque así sea ¿Y ustedes?
