Lo dijo ayer Felipe González y nada más oírlo ya sabía yo que mi jefe me iba a decir que dijera algo sobre el asunto. Para el ex-presidente del Gobierno, el exceso de nacionalismo, de provincianismo, de cortoplacismo y de otro par de ismos, sin duda importantes, pero que no recuerdo, tiene la culpa de que la construcción europea se haya paralizado, de que el euro viva sin vivir en él y de que estemos a punto de sufrir un colapso financiero político conspirativo en el mundo mundial. Y, eso, a mi jefe, le parece, muy acertado como no podía ser de otra manera.
Por eso también me dice que diga que ya no hay políticos como los de antes. Aunque resulta curioso que me diga que diga eso y que no me diga que diga que los políticos de antes son los políticos de ahora. Guerra encabeza las listas del PSOE de Sevilla y, seguramente, eso es lo más moderno del mundo. O si no, fijénse en las últimas portadas de la revista británica ‘Mojo’, que marca las tendencias en el mundo de los modernos modernísimos que juran por ‘santarussianred’. Este mes son los Pink Floyd, el mes pasado fue McCartney y el anterior Bob Marley. Todos recién llegados.