Las supuestas deudas ocultas de algunas autonomías y ayuntamientos que han cambiado de signo político con la llegada del PP han comenzado a inundar la ‘TDTparty’. Los medios situados más a la derecha del espectro mediático y que han encontrado en la TDT su mayor filón han convertido este asunto en un espectáculo al más puro estilo ‘Sálvame’ pero sin Belén Esteban.
‘La culpa es del que estaba antes’. Esta tesis parece haber calado entre los dirigentes del PP que tras el 22 de mayo gestionan gobiernos antes ocupados por la izquierda. Al parecer, puede ser el argumento perfecto para no responsabilizarse de los duros recortes sociales que previsiblemente están por venir ante la delicada situación económica.
Las tertulias más vistas de cadenas como Intereconomía o Libertad Digital están que arden con este asunto. El primer dirigente del PP en hacer saltar la liebre nada más llegar al sillón de la Alcaldía de Alcorcón fue David Pérez, quien asegura que su antecesor socialista dejó una deuda de 1,1 millones de euros a las escuelas infantiles y casas de niños del propio Consistorio. Más sonado ha sido el caso de la nueva presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, quien ha acudido a varios medios de comunicación a lo largo de la semana para denunciar que la Junta acumula un déficit del 4%, muy por encima del 1,7% que reveló su antecesor, José María Barreda. La alcaldesa de Aranjuez, María José Martínez, por su parte, ha denunciado que la deuda municipal «multiplica cuatro veces al presupuesto, lo que equivaldría a cerrar el Ayuntamiento en cuatro años».