Sáenz de Santamaría elude dar su opinión personal sobre la reforma de la legislación del aborto tras el Consejo de Ministros, como ya hizo el miércoles en el Congreso. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría, ha vuelto a pasar de puntillas sobre la reforma del aborto y hoy tampoco se ha mojado a la hora de defender el anteproyecto de Alberto Ruiz-Gallardón cuando ha sido preguntada al respecto en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
La mano derecha de Mariano Rajoy ha usado una estrategia similar a la que utilizó el miércoles en el Congreso cuando no dio su opinión sobre la norma con la que se pretende regular la interrupción voluntaria del embarazo y se limitó a criticar muy duramente el PSOE por no respetar opiniones distintas.
Y es que Sáez de Santamaría ha eludido este viernes ofrecer su posición personal sobre la reforma de la legislación del aborto que ha impulsado el Ejecutivo. «Lo que me corresponde trabajar es para fortalecer el entendimiento», ha zanjado.
En rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta contestaba así cuando se le ha preguntado por su opinión personal respecto de la reforma, que deroga el actual sistema de plazos y lo sustituye por uno de supuestos que despenaliza el aborto en los casos de riesgo para la vida o la salud de la madre y de violación, tal y como informa Europa Press.
«Es un tema en el que hay que ser muy consciente de la gran sensibilidad social que comporta y de las diferentes opiniones y como miembro del Gobierno a mi lo que me corresponde trabajar es para fortalecer ese entendimiento, para escuchar esas distintas opiniones, para analizar esas sugerencias y poder trabajar por una ley que pueda atender a los distintos puntos de vista», ha respondido.
Previamente, la vicepresidenta se ha referido también a la reforma para asegurar que el Gobierno «determinará aquellos puntos que puedan ser objeto de mejora» en el anteproyecto de Ley Orgánica de Protección de la Vida del Concebido y de los derechos de la embarazada cuando se pronuncien al respecto los órganos consultivos.
«Será de sus informes y análisis de los que determinaremos aquellos puntos que puedan ser objeto de mejora en esa ley para lograr lo que es un compromiso de todos y muy especialmente, del presidente del Gobierno, de trabajar hacia el entendimiento», ha declarado, en relación a los «puntos controvertidos» de la norma a los que aludía esta semana en el Congreso Mariano Rajoy.
