La Plataforma Regional por la Escuela Pública asegura que la consejera está presionando a los directores de los centros en los que se han instalado mesas de votación para que se retiren. El “masivo apoyo” que está teniendo la Consulta por la Educación puesta en marcha por profesores, padres y estudiantes para sondear a la ciudadanía sobre los recortes de José Ignacio Wert pone nervioso al PP. Al menos así lo asegura la Marea Verde, que ha acusado a Lucía Figar de tratar de boicotear la iniciativa. Según este colectivo, la consejera de Educación madrileña está presionando a los directores de los centros en los que se han instalado mesas de votación para que se retiren.
En un comunicado, la Plataforma Regional por la Escuela Pública (formada por Sindicato de Estudiantes, CCOO, UGT, Movimientos de Renovación Pedagógica, FAPA Giner de los Ríos, STEM y FRAVM) asegura que está recibiendo numerosas quejas de la comunidad educativa porque la Consejería de Educación “está presionando a equipos directivos de centros donde se han puesto en marcha las mesas para que las quiten, a lo que se suma que algunos de ellos no necesitan recibir dichas consignas, ya dificultan la puesta en marcha de cualquier acto democrático sin que nadie se lo pida expresamente”.
“Las organizaciones promotoras de la consulta indicaron que las mesas se pusieran en el exterior para evitar la intervención de las Administraciones educativas, que en el caso de la Comunidad de Madrid están en manos del PP y que, desde hace años, muestra actitudes poco democráticas con la comunidad educativa en su conjunto”, dice el colectivo.
No obstante, la Marea Verde señala que “no deja de ser sorprendente que se trate de impedir el uso de los centros públicos para que los ciudadanos realicen un acto plenamente democrático y, sin embargo, se permitan actos de exaltación del fascismo (como ha sucedido en Quijorna) o de ocupación por entidades religiosas para actividades privadas (como ocurrió con la JMJ)”.
Aunque estas no es el único boicot que está sufriendo la Consulta por la Educación. La Plataforma se queja también de que “ciertos responsables políticos, que están al frente de Ayuntamientos”, están intentando impedirla y que se instalen las mesas.
“A las comunicaciones que están realizando los ciudadanos para poner en marcha las mesas, se están recibiendo respuestas de todo tipo, que llegan incluso al absurdo cuando se esgrime que se tienen que presentar seguros de Responsabilidad Civil para poner las mesas o que no se puede responder porque se tiene mucho trabajo en el Ayuntamiento o Junta Municipal respectiva”, critica la Marea Verde.
Según la Plataforma, “no existe ningún motivo que justifique una negativa municipal a la instalación de una mesa de consulta, salvo que se ocupe la vía pública impidiendo el paso de transeúntes o vehículos. Dichas negativas pueden y deben ser recurridas, para lo que se debe acudir a las organizaciones promotoras de la consulta en cada territorio y exponer el caso concreto”.
Los intentos de boicot, que el colectivo achaca al “miedo” que tiene el PP ante el “masivo apoyo” que está cosechando la iniciativa, se están poniendo “en manos de los servicios jurídicos y tendrán respuesta legal”. “La Consulta Ciudadana por la Educación sigue adelante y será un éxito a pesar de todas las actuaciones ilegales que cosecha en su contra”, concluye la Marea Verde.