El primer ministro británico, David Cameron, ha expresado hoy su solidaridad con los gibraltareños al celebrarse su día nacional y destacó la «enorme dignidad» de la población del Peñón a raíz de las recientes tensiones con España.
En un mensaje a los gibraltareños grabado en un vídeo, el primer ministro señala que el Gobierno británico les apoya en los problemas con España, si bien apuesta por el diálogo para resolver las diferencias entre las dos partes, según informa Efe.
Las relaciones entre España y la colonia británica Gibraltar viven desde julio pasado una crisis después de que los gibraltareños lanzaran al mar 70 bloques de hormigón que dificultan las labores de los pescadores españoles en la bahía de Algeciras, lo que provocó que Madrid incrementara los controles para cruzar la frontera del Peñón.
Gibraltar quedó en manos británicas tras la firma del Tratado de Utrecht (1713), aunque España reclama su soberanía. Según Cameron, no hay posibilidades de hablar sobre la soberanía sin el consentimiento de su población. «El Reino Unido y Gibraltar tienen una larga y orgullosa historia», afirma el «premier», que informa de que la bandera gibraltareña ondeará hoy en la sede del Foreign Office en Londres.
Al referirse a los problemas con España, Cameron dice que «la población de Gibraltar ha afrontado las presiones de los meses recientes con enorme dignidad. Dejadme asegurarles que el pueblo británico y mi Gobierno estamos ahora con vosotros. Nuestra relación es sólida, segura y duradera».
«En el día nacional de Gibraltar, el Gobierno británico apoya de todo corazón vuestro derecho a decidir vuestro futuro político. Como he dicho antes, nunca acordaremos un traspaso de soberanía, o incluso empezar un proceso de negociación de la soberanía, sin vuestro consentimiento», puntualiza.
Además, Cameron recuerda la gran cantidad de españoles que trabajan en Gibraltar y se mostró a favor del diálogo para resolver los problemas con España.
El primer ministro dijo que quiere que España trabaje con el Gobierno gibraltareño y con el de Londres para encontrar una solución a las diferencias de los últimos meses.