Mariano Rajoy se ha cerrado en banda ante las constantes preguntas que los periodistas le han trasladado sobre la entrevista anoche a José María Aznar, en la que amenazó con regresar a la política. Hasta en cuatro ocasiones el jefe del Ejecutivo ha rechazado comentar las declaraciones del presidente de honor del PP, ya que “tengo por norma no comentar jamás opiniones de expresidentes”.
“Puede insistir todo lo que usted quiera”, le ha respondido con una sonrisa a una periodista que, por cuarta vez, le reclamaba su opinión sobre las críticas vertidas ayer por Aznar sobre la gestión de Rajoy al frente del Gobierno. El líder del PP ha asegurado que “jamás” opina sobre las declaraciones de sus antecesores en el Ejecutivo y “ahora tampoco”.
Sin ponerse nervioso, todo lo contrario, mostrando incluso cierta simpatía con los medios de comunicación, Rajoy ha insistido en que no va a hacer ningún comentario polémico sobre los expresidentes “y menos con Aznar”.
Eso sí, esto no ha significado que no haya lanzado algún dardo envenenado a su compañero de filas en el partido. Así, ha desligado que no es más que una opinión más igual que la que pueda tener otra persona.
Con estas declaraciones, Rajoy ha cumplido los presagio vaticinados a EL BOLETIN por dirigentes del PP que aseguraban que el jefe del Ejecutivo no iba a entrar en el “cuerpo a cuerpo” con Aznar.
