A los múltiples problemas judiciales que en los últimos tiempos se le acumulan al PP se suma ahora otro más. El plan de Esperanza Aguirre para reducir la condena a su ‘protegido’ Ángel Carromero ha chocado con la Audiencia Nacional.
El juez Fernando Grande-Marlaska ha rechazado la petición del exdirigente de Nuevas Generaciones (NNGG) de suspensión de la condena de cuatro años de prisión decretada por las autoridades cubanas por el homicidio imprudente de los disidentes Oswaldo Payá y Harold Cepero.
El magistrado, que presidente la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, ha argumentado que Carromero “no lleva a cabo vida alguna de carácter estrictamente penitenciario”. El exdirigente de NNGG del PP está únicamente controlado por una pulsera telemática desde el pasado 14 de febrero.
Asimismo, Grande-Marlaska tampoco ha admitido la suspensión de la retirada del permiso de conducir. “La no suspensión de prohibición de conducir vehículos de motor, no constando incidencia real y seria en el desarrollo de su vida diaria, no puede conceptuarse como causa de un perjuicio difícilmente reparable”, ha asegurado el magistrado.
