Las críticas de Beatriz Talegón, secretaria general de la Unión Internacional de Juventudes Socialistas, a la izquierda por debatir sobre el socialismo en un hotel de cinco estrellas han levantado ampollas entre las Juventudes del partido. Tres miembros de esta organización han exigido la dimisión de Talegón en una carta por “no predicar con el ejemplo”.
Los firmantes de esta misiva son el secretario general de las Juventudes Socialistas en Mallorca, Antoni Bujosa, y los militantes Rubén García y Mikel Zabala, que reconocen sentir “cierto pudor” por las palabras de la responsable. A su juicio, Talegón no es “congruente” con el discurso que pronunció ante los líderes de la Internacional Socialista porque, entre otras cosas, que “vuela en business” percibe un “gran salario” que está “muy por encima de las posibilidades de cualquier joven”.
Y a pesar de que dejan claro que están “profundamente de acuerdo” con “el fondo” del discurso de Talegón porque “se han cometido y se siguen cometiendo errores”, los firmantes de la carta consideran que no es “la persona adecuada para hablar de los puestos de confianza o ‘puestos a dedo’”, puesto que ella misma “pese a tener menos de 30 años” ya suma en su haber varios de ellos. “Y encima te atreves a criticarlos”, espetan en la carta, recoge Europa Press.
La propia Beatriz Talegón, que la semana pasada se mostraba sorprendida al ver cómo pretenden los líderes socialistas “promover la revolución desde un hotel de cinco estrellas en Cascais (Portugal), llegando en coches de lujo”, ya que no sabe cómo pueden “dar a los ciudadanos una respuesta” con ello, no ha tardado en contestar la carta de sus compañeros.
De forma tajante la dirigente de las Juventudes Socialistas ha aseverado que “no me he sentado en mi vida en primera clase”, recoge Efe. Talegón ha lamentado que sus compañeros hayan ido más allá de las críticas para entrar en “ataques personales” que “además no son ciertos”, y ha aclarado que su salario no es ni mucho menos tan alto como aseguran, ya que, según ha dicho, cobra 1.500 euros después de impuestos.
También ha esgrimido que habla tres idiomas y que lleva trabajando desde los 16 años, incluso en la empresa privada, así como de concejala en Cabanillas del Campo (Guadalajara) o como asesora de la Oficina de la Junta de Comunidades en Bruselas. “Me da pena la gente que tergiversa los hechos de una forma tan fea intentando atacar a un compañero, sobre todo cuando me resulta tan fácil rebatirlo”, ha zanjado.
