Mientras CCOO agiliza sus actuaciones para poner en manos de la Fiscalía y la Inspección de Trabajo sus denuncias por irregularidades contra el número dos de la CEOE, UGT trabaja al ralentí y se escuda en la “prudencia”. En círculos sindicales se relaciona su actitud “timorata” con el hecho de que la cafetería de la sede del sindicato en Madrid la gestione precisamente la empresa de Arturo Fernández.
Tras la denuncia de algunos empleados de que el dirigente empresarial les paga con dinero negro, CCOO de Madrid anunciaba esta mañana que entregará CCOO a la Fiscalía y la Inspección de Trabajo sus denuncias que desde 2009 viene haciendo de irregularidades en los pagos en cinco cafeterías de Arturo Fernández y adelantaba que se reunirá esta tarde con sus delegados sindicales en dichos centros de trabajar para recabar más información al respecto.
Además, informaba que también preguntará a los delegados si están existiendo presiones por parte del Grupo Arturo Canto Blanco para que no hablen de este asunto.
Sin embargo, desde la UGT se han limitado a sacar un comunicado plagado de obviedades y en el que manifiestan “su rotunda posición a favor de que se aclaren las denuncias que los medios de comunicación han publicado sobre un posible fraude en el pago de los salarios a los trabajadores”. “Y con la misma contundencia, si tales irregularidades quedan demostradas, UGT exige que las autoridades laborales adopten, a modo de pauta y con carácter definitivo, las medidas necesarias para salvaguardar el derecho de todos los trabajadores de hostelería a recibir un salario acorde a su trabajo y las cotizaciones que garanticen sus prestaciones de futuro”.
Esta actitud ha despertado recelos en el ámbito sindical después de que El País sacara a la luz que la sede principal de UGT, situada en la avenida de América de la capital, tiene una cafetería en la planta baja del edificio que gestiona el grupo Arturo Canto Blanco, la firma del presidente de los empresarios madrileños, Arturo Fernández y número dos de la CEOE.
Sin embargo, fuentes del sindicato han asegurado a elboletin.com que lo que ocurre es que quieren ser «prudentes, incluso parecer timoratos» sobre este tema y conocer de cerca las denuncias, así como esperar que Arturo Fernández presente los documentos que debe facilitar al respecto.
Y se justifican en que las denuncias concretas sobre el pago en negro no se han dado en UGT. «En el sindicato no tenemos ninguna denuncia al respecto”. “Todas proceden de gente de CCOO”, recalcan.