La infanta Cristina viajó apresuradamente la mañana del martes de Barcelona a Madrid para reunirse por la tarde en el Palacio de la Zarzuela con Carlos García Revenga. Lo hizo nada más conocer la imputación de su secretario en el ‘caso Urdangarín’, según revela Terra. De los cinco miembros de la Junta Directiva del Instituto Nóos sólo falta uno por imputar: la hija pequeña de los reyes.
Terra asegura que Revenga y doña Cristina, estuvieron en el mismo sitio, Zarzuela, y a la misma hora. Ningún motivo oficial les citaba en Palacio el día que se conocía la imputación del secretario de la Casa de Su Majestad, a la sazón tesorero de Nóos y, a la sazón, íntimo amigo de la duquesa de Palma.
La Infanta no regresó a Barcelona hasta la mañana del miércoles, cuando se la vio entrar en su residencia de Pedralbes pasadas las once de la mañana. Llegó a su domicilio con cara de preocupación y hablando por el teléfono. En el interior, la esperaba su marido, Iñaki Urdangarin.
