La asamblea que este fin de semana va a celebrar IU para reelegir a Cayo Lara como su coordinador general puede ser más tensa de lo que se pensaba. Gaspar Llamazares y Pedro Escobar están dispuestos a plantar cara al líder de la coalición de izquierdas en esta cita. El primero, quiere tener su cuota de poder en la nueva dirección de la formación; el segundo, mantener su independencia con la dirección para lanzar, si quiere, un nuevo guiño al PP.
La X Asamblea de Izquierda Unida que arranca mañana llega en el momento idóneo: las protestas y las concentraciones contra las políticas del PP se suceden todos los días y el PSOE no logra levantar cabeza desde su derrota en las pasadas elecciones generales. Un escenario en el que la coalición se está encumbrando como una verdadera alternativa de izquierdas y así lo demuestran los últimos sondeos del CIS que le pronostican cada vez más votos.
En esta situación, esta cita no debería sino reafirmar la ‘buena salud’ de la formación, pero todo puede verse truncado por dos figuras reconocidas de IU: Gaspar Llamazares y Pedro Escobar.
El diputado por Asturias y excoordinador general de la coalición ha estado estudiando en los últimos días presentar una candidatura propia y alternativa a Cayo Lara para pelear por el liderazgo y mantener su cuota de poder. Y es que, lejos de ‘jubilarse’, Llamazares ha estado más activo que nunca en las filas de IU hasta el punto de que hace apenas unos meses creó una nueva corriente: Izquierda Abierta, que se suma al PCE, Izquierda Republicana y la Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUP).
En Izquierda Abierta Llamazares ha integrado a todos sus afines para evitar que sean ‘laminados’ por la dirección de la coalición. Ahora, y con motivo de la mencionada Asamblea, quiere que tanto él como los suyos tengan un ‘hueco’ en la nueva cúpula de IU que salga de esta cita.
Una exigencia que estaría siendo estudiada por el entorno de Lara para evitar tener que enfrentarse a la candidatura del diputado por Asturias.
Por si la amenaza de Llamazares no fuera bastante, el coordinador general de IU tendrá que vérselas con Pedro Escobar y sus constantes salidas de tono. El líder de la formación en Extremadura se ha caracterizado por hacer caso omiso a los mandatos procedentes desde Madrid. No hay más que recordar la negativa de Escobar de aceptar la orden de Lara de evitar que el PP se hiciera con el poder en esta región.
Este sólo es un ejemplo de la rebelión del líder extremeño y que le llevó a principios de semana a ser el único coordinador territorial de la coalición que no ha formado un documento a favor de la candidatura de Lara.
A tenor de estos precedentes, fuentes de la formación de izquierdas admiten que es posible que a lo largo de esta X Asamblea de IU Escobar haga “alguna de las suyas” para escenificar que él va por libre y “nadie le manda”.