La decisión de Ignacio González de mantener a Lucía Figar al frente de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid ha convertido a la que fuese la ‘protegida’ de Esperanza Aguirre en la ‘eterna derrotada’ del PP. Tras la llegada de Mariano Rajoy a La Moncloa, sonó para el Ministerio de Educación e incluso para una secretaría de Estado, pero meses después sigue enfrentándose a la Marea Verde en la capital.
El colectivo que defiende la escuela pública no ha quedado indiferente ante la continuidad de Figar en el Gobierno regional, y ha sido de los primeros en advertir que la consejera no ha logrado ascender a pesar de que en estos últimos meses era algo que muchos daban por supuesto.
Así lo asegura José Luis Pazos, presidente de la FAPA Giner de los Ríos, quien ha definido a Figar como “la eterna derrotada” porque “sonó para el Ministerio de Educación, para una secretaría de Estado, y tras la marcha de Esperanza Aguirre sigue en Madrid”.
La consejera se queda en el Gobierno regional y con una cartera que “no quiere” debido a los “problemas jurídicos” a los que tendrá que enfrentarse a partir de ahora por no respetar los convenios colectivos y la ley a la hora de aplicar sus recortes. Para ella “es un castigo mantenerse aquí”, ha sentenciado Pazos, quien no obstante reconoce que al menos con ella “ya sabemos lo que podemos esperar”.
Por su parte, la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT Madrid se ha expresado en los mismos términos al indicar que “la gestión de esta Consejera será recordada por su afán privatizador, por su defensa a ultranza de la segregación del alumnado, por la externalización de responsabilidades, por el maltrato a los trabajadores (tanto funcionarios de carrera como interinos), por echar del sistema público a miles de interinos, por contratar irregularmente a nativos, por subir las tasas a límites insostenibles para las familias, por eliminar las becas, por el tupper, etc”.
Y es precisamente esta “política nefasta”, como la define UGT, la que le habría cerrado las puertas de otros puestos de mayor renombre y la que habría hecho que, tras la remodelación de Gobierno llevada a cabo por el nuevo presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, siga como consejera de Educación. Lucía figar es la responsable del conflicto con la Marea Verde, que se mantiene vivo por segundo año consecutivo, y por ello, según algunos observadores políticos, en el PP han decidido que sea ella la que afronte las consecuencias de las movilizaciones y protestas de este colectivo.
