La decisión que tomaron hace unos días 13 ex diputados socialistas de Madrid, que pidieron una indemnización al partido por no homologar sus salarios al de sus compañeros en el Congreso, podría salirles cara. El líder del PSOE de Carabanchel, Gabriel Callés, que ha asegurado a EL BOLETÍN estar muy sorprendido con este ‘motín’, ha pedido a los antiguos parlamentarios que dejen la formación por haber actuado de forma individual y sin tener en cuenta el daño que causaban al partido.
Callés se ha mostrado muy disgustado con la medida emprendida por los ex diputados socialistas, sobre todo porque dos de ellos, Joaquín García Pontes y Juan Antonio Ruiz Castillo, pertenecen a la formación de Carabanchel que dirige. Según ha indicado a este diario, se trata de una decisión que han tomado de forma individual, y cree que antes de hacer una reclamación de este tipo, “antes de dar cualquier paso, hay que hablar con el partido”.
Sobre todo ahora, ha defendido, que no son “tiempos para andarnos con tonterías” debido a la crisis que atraviesa el país. Por ello considera que “lo lógico” es que los ex parlamentarios “abandonen el partido”, ya que no han “respetado las estructuras” ni han “hablado con la dirección” de este asunto. “Para actuar a nivel personal hay que darse de baja”, ha indicado.
Callés, que no ha querido entrar en si la suma reclamada por estos socialistas es justa (según El País superaría los 700.000 euros), sí que ha asegurado que “el daño ya está hecho” y que no entiende el individualismo mostrado con esta petición. El secretario general ha matizado que los ex diputados reclaman unas cantidades de dinero por una actividad que realizaron en representación del PSOE, todo ello gracias a que fue el propio partido el que decidió incluirles en las listas electorales, y no porque hubiesen obtenido su plaza de concejal a través de una oposición.
Personalmente considera que algo así “no se debe hacer” porque han mostrado que no respetan “ni al partido ni a los ciudadanos”, y como líder del PSOE de Carabanchel opina que no tendrían que haberse “saltado las estructuras” del partido.
