La Audiencia Nacional ha condenado hoy a 60 años de prisión al dirigente de ETA Francisco Javier García Gaztelu, alias ‘Txapote’, por ordenar el asesinato José Javier Múgica, concejal de UPN en Leitza (Navarra), que se produjo el 14 de julio de 2001 al explotar una bomba lapa que le habían colocado en su furgoneta. El tribunal también ha condenado a los otros tres acusados de este hecho y miembros de la banda terrorista, Juan Carlos Besance, Andoni Otegi y Oscar Celarain.
El tribunal, que tuvo que repetir el juicio tras escucharse un comentario a través de un micrófono abierto en el que la juez Ángela Murillo llamaba “cabrones” a los acusados por reírse de la viuda de Múgica, ha impuesto una pena de prisión de 58 años para Besance y de 50 para Otegi y Celarain, según Europa Press.
En esta sentencia, que también obliga a los acusados a indemnizar a la viuda del concejal de UPN con 500.000 euros, la Audiencia Nacional ha considerado que todos los acusados son culpables de la comisión de delitos de asesinato terrorista, estragos terroristas y tenencia ilícita de explosivos. Además, el tribunal también ha condenado a los acusados por un delito de integración en ETA.
Los magistrados defienden que ‘Txapote’ fue el “máximo dirigente de la organización terrorista hasta su detención en febrero de 2001”, hecho que no impidió “su participación en los hechos a título de inductor” ya que ha quedado demostrado que el dirigente mantenía reuniones periódicas con los otros etarras, miembros del ‘comando Argala’, a los que entregó dinero suficiente para llevar a cabo el atentado.
Además, la resolución asegura que los indicios incriminatorios contra los cuatro integrantes de ETA anulan “cualquier atisbo de duda sobre su inocencia”, puesto que corroboran la versión inculpatoria ofrecida a la policía por Besance.
Una sentencia con la que se han mostrado satisfechos en UPN. Concretamente, el secretario de comunicación de la formación regionalista, Sergio Sayas, ha manifestado que la sentencia “hace justicia aunque no repara el daño porque el daño es irreparable”, al tiempo que exigía que “se cumplan íntegramente las penas”. También ha asegurado que “este es el camino para hacer justicia con las víctimas” y “el camino para derrotar definitivamente a ETA”.
