La mayoría popular ha tirado por la borda las aspiraciones del PSOE en Castilla-La Mancha al desestimar sus propuestas. Los socialistas habían pedido que se retirase el Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos que elaboró la presidenta regional, la popular María Dolores de Cospedal, para formular otro que contase con el consenso de todos los agentes sociales, pero el pleno de las Cortes, donde el PP tiene mayoría, ha decidido mantener los tijeretazos de la jefa manchega.
Según la resolución presentada por el PSOE, las medidas de recorte propuestas por Cospedal no servirán para estimular la creación de empleo y son “un ataque contra los pilares básicos del bienestar social”. Algo con lo que, como no podía ser de otro modo, no ha coincidido el PP, que una vez más ha defendido su iniciativa y ha asegurado que han tenido que “tomar estas medidas por culpa de la situación económico-financiera heredada del anterior Ejecutivo socialista”.
En este sentido, el consejero portavoz del Gobierno regional, Leandro Estaban, ha comentado, durante su intervención en el pleno, que “no se trata de un papel, no es solo un propósito, ya está en marcha, y pretende un ahorro de 1.815 millones de euros, crear empleo y proteger los derechos ciudadanos, haciendo de Castilla-La Mancha una región que sirva de ejemplo para el resto”.
Algo que el PSOE no ha podido ignorar. En concreto, el portavoz de los socialistas, José Luis Martínez Guijarro, ha exigido nuevas alternativas al plan del PP, ya que esta medida parte de una premisa “que no es cierta”, que es la necesidad de reducir 1.800 millones de euros para cumplir con el compromiso del déficit, y ha lamentado que algunas de las medidas que contiene el tijeretazo de la presidenta regional van a suponer que “muchas empresas y autónomos se vean abocados al desempleo”.
