CiU y PP han cerrado un acuerdo en Cataluña que permitirá la aprobación de los presupuestos autonómicos de 2011 y evitará la posibilidad de un adelanto electoral. La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha sido la encargada de anunciar en una rueda de prensa esta “nueva etapa de relación con el Govern”. Artur Mas ha querido dejar claro que este acuerdo es diferente al ‘pacto del Majestic’ de 1996.
En la sede del PP y sin ningún representante de CiU. De esta manera, Sánchez-Camacho ha dado a conocer un pacto que ya había adelantado horas antes en una emisora regional. Según explicó la dirigente del PP, el acuerdo contempla el compromiso de CiU de reducir el número de empresas públicas en un 10% antes de que acabe el año, así como el recorte en un 20% de sus asignaciones presupuestarias. El PP, que se abstendrá en la votación de las cuentas, también ha logrado que la Generalitat se comprometa a poner fin al “delirio” de las oficinas del Gobierno catalán en el extranjero, una red de ‘embajadas’ que extendió José Lluís Carod-Rovira durante el tripartito. La función de estas oficinas ahora será únicamente comercial.
La sanidad es el otro asunto más destacado del acuerdo. El Gobierno catalán ha aceptado reformar el decreto que regula la cartera de servicios públicos sanitarios para que las intervenciones cardiovasculares tengan prioridad por encima de otras como las de cambio de sexo. A pesar de estos compromisos, Sánchez-Camacho ha aclarado que había poco margen para negociar las cuentas de este año, ya que estaban prácticamente cerradas, pero ha ofrecido al presidente catalán, Artur Mas, negociar desde el principio las de 2012.
En declaraciones a Antena 3, Mas ha querido dejar claro que este acuerdo no supone la “reedición” del ‘pacto del Majestic’ que permitió en 1996 la investidura de José María Aznar como presidente tras un acuerdo con Jordi Pujol. Además, apuntó que el pacto sólo lo firma el PP porque ni PSC ni ERC aceptaron la propuesta del Govern.
Por su parte, el portavoz de CiU en el Parlament, Jordi Turull, en una rueda de prensa en la Cámara, ha alabado la “responsabilidad” del PP y apuntó que los presupuestos no son los “que le gustaría a cualquier gobierno que comienza, pero sí los que el país necesita”.