El presidente del Congreso, José Bono, ha salido en defensa de José Luis Rodríguez Zapatero durante un encuentro con empresarios catalanes y andorranos. El dirigente socialista justificó la caida de popularidad del jefe del Ejecutivo al recordar que la crisis económica ha arrastrado también la de otros líderes europeos como Nicolas Sarkozy o Angela Merkel.
“Sería un verdadero milagro laico” que “no hubiera caido” su popularidad, aseguró Bono quien además cree que esta situación “no es consecuencia imputable a una acción de un gobierno, y si fuera de otro modo, nadie lo entendería”.
Respecto al papel de los gobiernos en la crisis económica, Bono sostiene que la actividad económica discurre al margen de la actuación gubernamental, ya que no fijan el precio del dinero ni el tipo de cambio.