José Luis Rodríguez Zapatero ha fijado como una de las prioridades de la agenda española para la Presidencia europea el impulso de los vehículos eléctricos para luchar contra el cambio climático y reducir la dependencia energética de los países de la Unión.
Durante su intervención en el Parlamento Europeo para presentar el programa español para la Presidencia de turno de la UE, Zapatero estableció cuatro prioridades: la economía, las nuevas instituciones, las relaciones exteriores y la ciudadanía.
En el capítulo económico, el presidente español, además de citar de manera expresa los coches eléctricos, también instó a avanzar en la cooperación energética, recordando que en los últimos 10 años la dependencia de la Unión ha aumentado nueve puntos, lo que supone 67.000 millones de euros al año que la UE transfiere a otros países. En este sentido, propuso crear “un mercado común de la energía”, que conlleve interconexiones energéticas y un marco regulador común que consolide el mercado. En este contexto, se fomentaría el desarrollo de las energías renovables.
De manera global, el presidente español instó a avanzar en la unión económica para poder competir no sólo con EEUU sino con países emergentes como China o India. Al respecto, también propuso mejoras en la educación, culminando el proceso de Bolonia, para formar a trabajadores bien preparados.
Otra de las propuestas que Zapatero ha formulado ante los eurodiputados ha sido un “gran pacto entre empresario y trabajadores” que sirva de “palanca para llevar a cabo nuestros objetivos”. No obstante, no aclaró mucho más al respecto.
Los portavoces de los grupos parlamentarios europeos han acogido con interés las propuestas de Zapatero, aunque el Partido Popular de la Eurocámara ha sido muy crítico con las soluciones económicas que ofrece. Así, el líder de este partido en Europa, el francés Joseph Daul, recordó que España es un país con una tasa de paro récord del 20% y un déficit público que se aproxima al 11% y, aunque comparte la voluntad de volver al crecimiento, reconoció no estar seguro de que las soluciones que Zapatero “y su familia política proponen nos permitan salir de esta crisis”.
El portavoz del Grupo de la Alianza de los Demócratas y Liberales (ALDE), el belga Guy Verhofstadt, se mostró de acuerdo en aumentar las competencias de la Comisión Europea porque “no se puede decir que hay países que no hacen suficientes esfuerzos para afrontar la crisis” y “no dar instrumentos a Bruselas para afrontar la situación”.
Zapatero también instó a dar un impulso a las nuevas tecnologías, fomentando el comercio electrónico para crear empleo estable. En este sentido, apostó por invertir más en la sociedad de la información.
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