“Tiendo la mano al señor Iglesias, puede contar con el partido socialista para dialogar y llegar a un acuerdo cuanto antes”, ha asegurado el secretario general del PSOE desde Cataluña. La distancia entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias sigue reduciéndose. Después de la investidura fallida del primero, las posiciones entre ambos se agrandaron, algo que está menguando con el paso de los días. Si la semana pasada el socialista dejaba la puerta abierta a que el líder de Podemos fuese su vicepresidente
, este martes el secretario general del PSOE ha asegurado que estaría “encantado” de reunirse con Iglesias.
“Tiendo la mano al señor Iglesias, puede contar con el partido socialista para dialogar y llegar a un acuerdo cuanto antes”, ha declarado Sánchez en la rueda de prensa posterior a su encuentro con el presidente de la Generalitat Carles Puigdemont. De esta manera, el socialista busca romper una barrera que se había creado después de que su formación, defendiendo que sin Ciudadanos no habría reunión, rechazase la mesa a cuatro que pidió reactivar el propio Iglesias.
A pesar de estar “encantado” por reunirse con el líder de la formación morada, el líder del PSOE no ha olvidado el argumentario que empleó en su sesión de investidura para cargar contra la formación morada y, aprovechando su visita a Cataluña, ha aseverado que “muchos catalanes no entienden que el voto de Iglesias sea el sostén para que Rajoy siga siendo presidente”. Y más viendo que el 20-D en la región se votó contra los populares, según el secretario general.
Una tensión que Sánchez quiere rebajar con el fin de acercar posturas en una reunión que espera celebrar aunque ha adelantado que, por el momento, aún no ha recibido ninguna propuesta formal del partido de Iglesias para celebrar ese encuentro.
