El líder del PSOE se entrevista con el primer ministro de Portugal que fue nombrado tras una coalición de izquierdas. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, viaja este jueves a Lisboa para mantener una reunión de trabajo con el primer ministro de Portugal, Antonio Costa, en la que será su primer acto público en 2016.
En el inicio del curso, y después de las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, Sánchez ha elegido Portugal para retomar su agenda internacional. Y parece evidente que la foto que quiere mostrar es la de un gobierno de izquierdas que logró ponerse en pie tras un primer intento de la derecha. El primer ministro portugués, Antonio Costa, perdió las elecciones al igual que Sánchez, pero consiguió ser apoyado por los otros dos partidos de izquierda.
Sánchez siguió muy de cerca la situación política en el país vecino, donde de las elecciones del pasado octubre surgió en primer momento un gobierno de centro derecha que decayó a los pocos días al no contar con mayoría absoluta. Después, el líder del Partido Socialista portugués recibió el encargo del presidente, Anibal Cavaco Silva, y logró liderar el Ejecutivo, con el apoyo de los comunistas y el Bloque Izquierda.