El extesorero asegura que el asalto a su casa fue “un trabajo encargado por alguien” y recuerda que se produjo “a los tres días” de su juicio con Cospedal. “Si insisten en que estoy en excedencia, pediré mi reincorporación”. Así lo advierte el extesorero del PP Luis Bárcenas en una entrevista en Interviú, la primera tras su salida de la madrileña cárcel de Soto del Real, en la que desmiente que no haya pedido volver a su puesto de trabajo. “Existe una carta entregada en el departamento de personal y firmada y sellada en recepción por Milagros Puente que confirma mi petición de reincorporación al PP”.
Según explica Bárcenas, “el día que regreso al partido tengo una reunión con Mariano Rajoy en su despacho en presencia de Javier Arenas para definir mis funciones” y “si insisten en que estoy en excedencia, pediré mi reincorporación”.
El que fuera responsable de la Tesorería del Partido Popular también pone sobre la mesa las dudas que tiene sobre asalto a su casa. Bárcenas afirma que se “frivolizó” este suceso y no se reflejó “la brutalidad que vivió mi familia”, ya que, entre otras cosas, “las balas estaban manipuladas, con puntas de acero, para deshacer a un jabalí”.
Asimismo, recuerda que “el asalto se produce a los tres días de que Cospedal casi se rompa las narices contra un árbol (a la salida del juicio contra él) y encima ese individuo es de Cuenca…” y remarca que “siempre he pensado que era un trabajo encargado por alguien”.
El también exsenador del PP reconoce que siempre pensó que no entraría en prisión, ya que “nunca ha habido riesgo de fuga, porque no tenía ninguna intención de eludir la acción de la Justicia”. “Si hubiera estado planificando mi fuga”, explica, “me habría dedicado a cambiar la casa a nombre de mis hijos, ir sacando el dinero del banco,…hacer movimientos que no hice”.
Bárcenas también reconoce que se equivocó de estrategia y “hubiera tenido que decir que me acojo a mi derecho a no declarar… y que investiguen”. “En función de los argumentos que usaba, tanto la UDEF, como la ONIF y la fiscalía les daban la vuelta para ir contra mí. Me tenía que haber acogido al derecho de no declarar y esperar el juicio oral”, afirma.
El extesorero también aprovecha esta entrevista para lanzar un nuevo mensaje a Rajoy por su comparecencia del 1 de agosto. “Cuando vi al presidente pronunciar mi nombre en los términos que utilizó, me hizo daño”, dice Bárcenas que no tiene reparos en reconocer que “hemos tenido una relación espléndida y cercana, hasta la Semana Santa del 2013”. “Me equivoqué, nunca debí confiar en Mariano Rajoy”, asegura Bárcenas, en referencia a las declaraciones del jefe del Ejecutivo en esa comparecencia.
Respecto a los sms que intercambió con el líder del PP, “estaba convencido de que presentaría su dimisión”, ya que “si aplicamos las normas que rigen en los países de nuestro entorno, por temas mucho menores no dura un primer ministro ni 24 horas”.
Bárcenas no quiere pasar la ocasión para remarcar que “si el partido me trata con respeto, continuaré así, pero si su discurso político es utilizarme como icono de corrupción, pasaré al ataque. No voy a dejar de nuevo que me instrumentalicen”.