La directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, ha señalado que el Gobierno ha sido quién ha gestionado la repatriación y quién lo ha pagado. “El Gobierno iniciará las gestiones con la Orden de San Juan de Dios, que asumirá los gastos que tenga que asumir”. Así lo ha afirmado la directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, en torno al desembolso económico que ha conllevado la repatriación del religioso Miguel Pajares, contagiado por ébola.
En una rueda de prensa en el Ministerio de Sanidad, Vinuesa ha evitado en todo momento cuantificar el dinero que ha supuesto esta repatriación, así como quién la asumirá en su totalidad. A pesar de esto y tras varias preguntas al respecto, la responsable de Salud Pública ha recordado que Pajares pertenece a una orden religioso que es la que reclamó el regreso de uno de sus miembros.
De ahí que ahora tenga que negociar el Gobierno con la Orden de San Juan de Dios quién afronta los gastos de esta repatriación. Hasta que pase eso, Vinuesa ha señalado que “ahora mismo quién lo ha gestionado el Gobierno y lo ha pagado es el Gobierno«.
Junto a esto, la directora general de Salud Púlica ha tenido que hacer frente a las críticas que se han producido por la repatriación de Juliana Bohi, una de las misioneras que se encontraban en Liberia y no de otras religiosas en la zona en peor situación. “España repatría a los españoles”, ha remarcado Vinuesa.
“La hermana Juliana ha venido porque había capacidad en el avión, pero se repatría a los españoles, no a los que no son españoles”, ha aclarado.
