El banco cerró el tercer trimestre con un beneficio atribuido de 2.262 millones de dólares (unos 2.141 millones de euros al cambio actual), lo que supone un descenso del 9,3% en comparación con el mismo periodo del año pasado. Las acciones del banco se desploman casi un 8% en la Bolsa de Nueva York, la mayor caída tras presentar resultados en al menos una década.
Los ingresos entre julio y septiembre sumaron 13.273 millones de dólares (12.566 millones de euros), un 2,2% más que un año antes. De esa cifra, los ingresos procedentes de la gestión de activos aumentaron un 6%, hasta 5.031 millones de dólares (4.763 millones de euros), mientras que los procedentes de operativa bursátil se elevaron un 10%, hasta 3.679 millones (3.483 millones de euros).
Sin embargo, la cifra de negocio de la rama de banca de inversión retrocedió un 24%, hasta 1.048 millones de dólares (992 millones de euros), mientras que los ingresos por comisiones y tasas descendieron un 3%, hasta 1.098 millones (1.039 millones de euros).
«Si bien el entorno del mercado se mantuvo mixto este trimestre, la empresa obtuvo resultados sólidos», declaró el presidente y consejero delegado de Morgan Stanley, James P. Gorman, quien se ha comprometido a nombrar un sucesor antes de mayo, aunque la decisión podría tomarse meses antes de esa fecha. Los tres candidatos para sustituirle son Ted Pick y Andy Saperstein, copresidentes de la entidad, y Dan Simkowitz, jefe de gestión de inversiones.