JP Morgan se coloca al frente del retroceso que algunos gigantes financieros estadounidenses se apuntan en Wall Street tras presentar sus cuentas trimestrales. Las cuentas trimestrales de JP Morgan no gustan ni a analistas ni a inversores. El mayor banco de EEUU por activos no ha conseguido cumplir con las previsiones del mercado y el castigo llega en forma de caídas del 3,5% de su valor en Bolsa en el mercado de futuros sobre acciones de Wall Street.
De enero a marzo, la entidad tan solo alcanzó un beneficio de 5.270 millones de dólares frente a los 6.530 millones del ejercicio pasado. La cifra se traduce en 1,28 dólares de ganancia por acción que muy lejos quedan de los 1,39 dólares que aguardaba el consenso de analistas, fundamentado en unos ingresos que no han llegado a consecuencia de un drástico recorte en las unidades de hipotecas y negociación de valores.
Muy distinto rumbo es el que marcan los primeros compases de negociación para H&R Block. Los futuros sobre las acciones de la entidad se revalorizan en más de un 5,6% tras conocerse que ha alcanzado un acuerdo de venta sobre ciertos activos con el Bofl Federal Bank. Aunque no se ha desvelado el importe ni las condiciones de la transacción, sí se sabe que podría incrementar de 0,07 a 0,09 dólares el beneficio por acción del próximo ejercicio 2015.
