El descenso bursátil de ACS, la constructora que preside Florentino Pérez, ha encontrado un buen parapeto en UBS, el bróker con el que tradicionalmente opera el empresario. La entidad suiza dice verle un potencial alcista del 4,7% a medio plazo, en contra del consenso de mercado y a solo unos días de haber presentado unos resultados débiles a juicio de los expertos.
En cifras concretas, los analistas de UBS han mejorado el precio objetivo de la constructora de Florentino de los 14,00 euros por título que le marcaban hasta ahora a 16,5 euros unitarios. Este nuevo umbral rompe con el consenso de mercado que dibuja una cota máxima para el medio plazo en la cotizada próximo a su su valoración actual en un momento en que, además, varios gestores prevén próximos recortes de consejo a la luz de las recientes cifras trimestrales de la endeudada compañía.
Lo más curioso del caso es que, a pesar del elevado potencial que los suizos han atribuido a ACS, han mantenido inamovible su recomendación neutral para con el valor en lugar de invitar a tomar posiciones para aprovechar la remontada que en cierto modo vaticinan. El caso, recuerdan en algunos foros y muchos gestores, es que UBS es el bróker que tradicionalmente ejecuta las operaciones de compra o venta de acciones dictadas desde la cúpula directiva de la constructora, cuya máxima responsabilidad recae sobre Florentino Pérez.
Sobre este punto, son varios los que recuerdan como el banco de inversión suizo era uno de los protagonistas indiscutibles hace solo unos meses en la negociación intradía de Iberdrola, participada estrella de ACS que durante años luchó por ganar un puesto en su consejo de administración. Con las operaciones comandadas por Florentino, principal perseguidor de este objetivo, y ejecutadas por UBS buscaban mantener a raya el precio de mercado de la eléctrica. Así, ACS se evitaba tener que aportar garantías adicionales a los bancos que habían prestado el dinero para su entrada en la energética a través de derivados.
Desde enero hasta ahora, ACS se ha apuntado un descalabro del 32% en su valor bursátil. Precisamente, su fallido ‘asalto’ a Iberdrola es uno de los puntos que más sangría inversora le ha costado a la compañía, un fiasco que también se dejó notar en las cuentas a cierre de septiembre que hace solo unas jornadas presentó la compañía. En los nueve primeros meses del año, la constructora de Florentino perdió 1.099 millones de euros frente a ganancias de 739 millones del ejercicio pasado, mientras que su endeudamiento ascendió a 9.214 millones.
Este martes en que la cotizada recibía el amable consejo de UBS, la negociación en ACS quedaba muy por debajo de su media anual diaria. En las compras sobre el valor destacaban los saldos acumulados por las mesas de Société Générale, Gestión de Patrimonio Mobiliario (GPM) y Merrill Lynch. UBS, en cuarta posición a este lado de la ventanilla. Mientras, en las ventas, los más aventajados eran los brókeres del Santander, Inversis e Interdin.