En lo que va de año, la corona noruega ha experimentado un leve aumento de su cotización con el dólar y el euro, entre el 4,5% y el 5%, respectivamente, pero el movimiento parece haberse acentuado en los últimos días en paralelo con la escalada de los precios del petróleo.
Para frenar la apreciación de su divisa, la autoridad monetaria de este país nórdico aplicó un recorte de medio punto a sus tipos de interés de referencia, que quedaron en el 1,5%. Sin embargo, los analistas consideran que estas rebajas no tendrán ningún impacto. Al fín y al cabo, los tipos ya son mucho más reducidos que en países como Brasil, en el que están al 9,5% y, eso no ha sido obstáculo para que se haya mantenido e incrementado la afluencia de capitales.
La ayuda podría llegar desde el exterior, en opinión de algunos analistas consultados por la agencia Dow Jones. Para ellos la mayor parte de las divisas europeas distintas del euro que se revalorizan en estos tiempos, sólo lo hacen por la debilidad que se asocia con la evolución del dólar.
Por eso, el panorama puede cambiar con mucha rapidez si los incipientes signos de mejoría que parece mostrar la economía estadounidense se confirmaran. Al fin y al cabo, la corona noruega sólo se habría convertido en un nuevo valor refugio alternativo a divisas como el franco suizo que han ejercido este papel tradicionalmente.
