Los inversores permanecían tranquilos ante el ataque de Fitch Ratings sobre el Reino Unido. La calificadora ha advertido a las autoridades británicas que no están afrontando con la corrección necesaria la crisis de la zona del euro y por eso ha rebajado la previsión del país hasta «negativa». Pero la Bolsa de Londres no ha registrado una caída superior al 0,2% en la apertura.
Fitch ha decidido cambiar desde «estable» a «negativa» su previsión sobre la nota del Reino Unido al considerar que el déficit presupuestario del país solo está por detrás del de EEUU y que su endeudamiento es significativamente mayor que el de la media de los países con AAA.
La agencia de rating advierte de que la evolución de la crisis de la zona del euro tiene «implicaciones significativas» para el Reino Unido por su «relación comercial y financiera» con Europa y acusa al Gobierno de David Cameron de tener muy poca capacidad de reacción ante los problemas procedentes del Viejo Continente.
En este sentido, el comunicado asegura que «la relajación de las tensiones del mercado financiero en la zona del euro en los últimos meses ha reducido el riesgo para el Reino Unido», aunque, en opinión de Fitch, «la crisis no está resuelta y podría intensificarse».
El hecho de poner la nota británica en perspectiva negativa supone que existen más del 50% de posibilidades para que antes del 2014 el Reino Unido pierda su AAA.