Alemania no ha logrado colocar el máximo previsto, que eran 5.000 millones de euros, en la subasta de bonos a diez años que ha convocado hoy. Se ha quedado en 4.093 millones de euros, aunque eso sí, ha pagado intereses más bajos que la última vez (1,82% en relación al 1,93% de la última colocación).
El ratio de cobertura ha sido, no obstante y a pesar de no haber logrado el máximo, de 1,4 veces la oferta. Así que también ha mejorado en comparación al 1,3 registrado el 4 de enero, cuando Alemania organizó la primera subasta a largo plazo del año.
En Portugal también se han colocado bonos. En concreto, 1.500 millones de euros (el máximo previsto) en letras a tres y seis meses. La demanda superó los 4.000 millones de euros y los costes de financiación fue más bajo en ambos vencimientos (un 4,068% en las de tres años y un 4,463% en la de seis años).
Los expertos vaticinaban esta mañana que si Portugal conseguía colocar letras a un interés por debajo del 5% y aún así recaudar el máximo previsto, se podría considerar un éxito ante la cantidad de rumores que han surgido durante las últimas semanas sobre la necesidad de requerir un segundo rescate internacional.