El estancamiento de la economía alemana, que apenas ha crecido un 0,1% en el segundo trimestre de 2011, ha golpeado fuertemente a las principales bolsas europeas. Así, a media mañana la Bolsa de Francfort se dejaba cerca de un 2%, una intensidad compartida también por el Ibex 35. París (-1,35%) y Londres (-0,85%) registraban pérdidas de carácter más moderado.
Esta tendencia negativa también era compartida en Oriente Medio y el norte de África. La Bolsa de Estambul caía al cierre de esta edición un 1,72%, mientras que Tel Aviv lo hacía un 0,53%. En El Cairo el mercado bursátil cotizaba plano, aunque se inclinaba hacia el rojo. Por su parte, el Nikkei 225 cerró con ganancias leves (+0,23%) mientras que la Bolsa de Hong Kong retrocedió un 0,24%.
En este escenario, el mercado de deuda secundaria se mantenía estable. Con el bund a diez años ofreciendo una rentabilidad del 2,30% y el bono francés un 2,96%, las potencias periféricas mantenían el rendimiento de la semana pasada: España (5,01%), Italia (5,02%), Irlanda (9,83%), Portugal (10,53%) y Grecia (15,48%).
En el mercado de divisas, el euro se compraba por 1,4396 dólares mientras que la moneda estadounidense, a su vez, cotizaba a 76,794 yenes japoneses. En cuanto a las materias primas, la onza de oro se podía adquirir por 1.780 dólares por unidad mientras que el barril de Brent con entrega en septiembre costaba 108,78 dólares por unidad.