Los parqués europeos han abierto la sesión indecisos y a la espera de las palabras que esta tarde ofrecerá por primera vez a los medios el presidente de la Fed de EEUU, al estilo de su homólogo europeo Trichet. A media sesión, han cogido impulso gracias a los buenos resultados de algunas compañías estadounidenses. Sin embargo, el temor a este nuevo sistema ha hecho mella en los mercados que han desandado sus alzas.
Los miedos a que, aunque no se produzca ninguna variación en el tipo de interés en EEUU, las palabras de Bernanke puedan interpretarse como negativas para la recuperación económica de la mayor economía del mundo han hecho que las alzas de primera hora en Wall Street se volvieran pérdidas en muchos casos a medida que avanzaba la sesión. En la misma línea se ha movido el FTSE 100 de Londres, que ha sido el índice más rezagado durante todo el día por su mayor vinculación con el mercado neoyorquino.
Con este panorama, la mayor parte de índices europeos llegaban a pocos minutos del cierre de jornada bursátil con unas ganancias menores de lo que se hubiera podido esperar a juzgar por el ritmo de media sesión. La plaza más alcista, al cierre de esta edición, era Milán con subidas del 1,44%, la seguían París (0,60%) y Fráncfort (0,54%). Londres se ha convertido en el farolillo rojo de la sesión con un retroceso del entorno del 0,15%, una cifra similar a la registrada a la misma hora por los índices más conocidos del parqué neoyorquino.
La atención se desplaza hacia Grecia en lo que se refiere al mercado de deuda. Los rumores crecientes sobre la reestructuración de deuda en la República Helena ha llevado a sus papeles soberanos hasta nuevas cifras récord. La prima de riesgo de los bonos griegos a diez años se ha disparado hasta los 1.285 puntos básicos y su rentabilidad ha alcanzado el 16,12%, muy lejos del 12% de las últimas semanas. Los títulos irlandeses han subido hasta el 10,24% de rentabilidad, mientras que italianos (4,82%) y lusos (9,77%) han mejorado su posición con respecto al ‘bund’ de referencia que hoy ha marcado un 3,27% de rentabilidad.
De vuelta a la expectación causada por Bernanke, el dólar remonta posiciones. Cada euro se cambiaba por 1,465 billetes verdes y cada uno de éstos por 82,67 yenes.
En las materias primas, el barril de Texas ha coqueteado con los 112 dólares por barril durante toda la sesión a causa de las noticias de Libia y Siria. El oro, por su parte, se mantiene en los 1.507 dólares la onza.