Las bolsas asiáticas subieron por segundo día, impulsadas por las compañías de materias primas ante el avance en los precios de los metales.
En Europa, pese a las dudas iniciales, los mercados volvían a situarse en el terreno de los avances. Las subidas de las compañías mineras y de las automovilísticas lograba dejar en un segundo plano los resultados peores de lo esperado presentados por Roche Holding o Electrolux.