Las grandes fortunas españolas se inmunizan al ‘efecto Podemos’

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Las grandes fortunas españolas se inmunizan al ‘efecto Podemos’

Billetes de euro

“No hay pánico”, sentencian los gestores y asesores de sicavs al desmentir la huida de capitales hacia Luxemburgo porque “la capacidad de los políticos para hacer tonterías es limitada”. Las grandes fortunas en España han perdido el miedo al tan predicado cambio político. Si bien la incertidumbre y el ascenso de Podemos han provocado la espantada, o en el mejor de los casos el retraso en la entrada, de ciertos inversores extranjeros, los participantes de fondos de inversión y sicav nacionales permanecen impasibles.

En los despachos de asesoría de las grandes fortunas de nuestro país ya no se escucha el otrora tan temido: “¡Que vienen los rojos!”. Así lo explican altos cargos de varias casas especializadas en la gestión y asesoría de vehículos de inversión colectiva como los fondos y las siempre polémicas sicav (sociedades de inversión de capital variable).

Aunque según cifras de Inverco, la patronal del sector, la sangría para la economía española podría ascender a más de 17.000 millones de euros, la retirada ante un hipotético sistema fiscal más agresivo con estos vehículos de inversión no ha comenzado aún. En este sentido, los expertos consultados subrayan que cualquier medida por improbable que resulte para su implantación no tendría efecto retroactivo, con lo que la huida sería posible sin mayores previsiones.

El director general de Gefonsa, la sociedad de valores del grupo Banco Caminos, reconoce que si bien “algún partícipe hace alguna pregunta”, no existe un clima generalizado de miedo ante el escenario en que pueda resultar la actual incertidumbre política. “No hay pánico”, sentencia Ricardo Murillo, después de señalar que este panorama no es nuevo pues lleva sonando desde la pasada primavera y que tomar decisiones antes de que haya “realidades” en el Congreso podría ser más perjudicial que beneficioso.

Desde Cartesio, el socio y gestor Álvarez Martínez, ya se pronunciaba antes de la celebración de los comicios del pasado 20 de diciembre en la misma dirección. Los inversores poco asesorados son a menudo, y en su opinión, “malos jueces” de la escena política. En este sentido, subrayaba que aquellos que se apresuraron a hacer las maletas con el que “¡que vienen los socialistas!” en tiempos de Felipe González se perdieron el mayor rally de la historia de la Bolsa española. Asimismo señaló que como ha constatado el ejemplo de Syriza en Grecia, “la capacidad de los políticos para hacer tonterías es limitada”.

En esta misma línea de discurso, Félix López, director de la sociedad gestora de Atl Capital, apunta que “en las campañas electorales se dicen muchas cosas y luego no se hace absolutamente nada”. En este sentido pone en valor el papel de las sicav como dinamizadoras de la inversión y el hecho de que las normas ya en desarrollo prevén que se eliminen sociedades del más puro estilo instrumental al servicio de una única fortuna personal, las conocidas como sicav de mariachis en las que un único partícipe ostenta el control de la mayoría de las acciones.

Precisamente en lo que respecta a la legalidad vigente, Murillo destaca que cualquier movimiento en esta línea debería hacerse bajo la tutela de Bruselas, que es precisamente quien ha puesto la lupa sobre la normativa que rige para estas sociedades de inversión en países como Luxemburgo, el que sería el destino natural de la huida desde España. En la propuesta de directiva contra la evasión fiscal fechada el pasado 28 de enero, la Comisión Europea plantea que los rendimientos obtenidos por vehículos como las sicav tributen por la vía del impuesto a la renta de sus partícipes, y no con impuestos de sociedades a tipos reducidos, como viene ocurriendo en el Gran Ducado.

Si bien es cierto que los expertos consultados explican que la mayoría de preguntas en este sentido miran hacia Luxemburgo, de momento se trata más de consultas puramente informativas que del establecimiento de verdaderos ‘planes B’. Así destacan que la escapada sería tan sencilla como el establecimiento de una sicav filial en el país centroeuropeo para proceder después a una fusión por absorción inversa, que no debería contar con mayor complicación por los numerosos precedentes que ya existen.

“La preocupación en 2011 y 2012 era mucho mayor que ahora”, explica el consejero delegado de Atl Capital, la firma de gestión de patrimonios que preside Jaime Espinosa de los Monteros. Desde Gefonsa coinciden en que las consultas para la huida eran mucho más numerosas y más determinantes en los tiempos en los que el rescate de la Troika a España se presentaba como una opción más que probable que, a todas luces, sí hubiera implicado una abultada huida de capitales, la paralización de proyectos de inversión y la agresiva subida de presión fiscal con la que por el momento, sentencian los expertos en la guía de las grandes fortunas de España, solo coquetean sin entrar a fondo algunos partidos políticos que está por ver el papel que ocupan en la próxima legislatura.

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