Los precios del petróleo amplían ganancias este martes ante los nuevos ataques de Francia sobre posiciones del ISIS en Siria. Los precios del petróleo amplían ganancias este martes frente a la pasada jornada. El repunte se produce después de que Francia haya vuelto a atacar el bastión del ISIS en Siria, Raqqa: saltan todas las alarmas ante la posibilidad de que el conflicto reduzca los suministros de crudo por parte de esta región.
Si bien el Brent inglés tocaba mínimos de tres meses este pasado lunes, situándose poco por encima de los 43 dólares por barril, esta mañana ha girado al alza en Europa después de que los bombardeos franceses hayan puesto sobre la mesa la posibilidad de que los suministros se corten. El giro de los acontecimientos sorprende: hasta ahora se esperaba que las ganancias se mantuvieran bajo mínimos, dada la falta de demanda de crudo que se ha venido experimentando con el parón de las economías emergentes.
Cabe recordar que sobra petróleo y la OPEP insiste en mantener su cuota de mercado. Mientras, sin ir más lejos, los suministros de crudo de Estados Unidos subieron por séptima semana consecutiva en el último recuento, que ha situado las reservas cerca de niveles no vistos en esta época del año durante, al menos, las últimas ocho décadas.
De momento, las preocupaciones ante un dólar fuerte, el miedo a la subida de tipos de interés el próximo diciembre en Estados Unidos, y el debilitamiento de la demanda petrolera de China continúan empujando el crudo a la baja e impidiendo el rally. Ayer el precio medio del crudo vendido por la OPEP caía por debajo de los 40 dólares por primera vez desde 2009: un dato preocupante para los exportadores, ya que evidencia en gran medida el coste financiero que supone para la OPEP la cuota de mercado que quiere mantener.
No obstante, el miedo ante la posibilidad de que los ataques franceses hagan peligrar el abastecimiento consigue mantener el precio del crudo a flote durante la sesión
