La cumbre sobre presupuestos de los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) ha sido hoy uno de los asuntos que han tratado las tertulias mañaneras y en la SER Pepa Bueno hacía notar que aunque España lo ha calificado de satisfactorio el presupuesto plurianual para los próximos siete años lo cierto es que “perdemos 1.000 millones para poner en marcha iniciativas contra el paro juvenil, por ejemplo”.
Mariola Urrea puso el acento en otra cuestión, ya que ella considera “una pena” que este tipo de reuniones sirvan para transmitir la impresión de carrera desenfrenada de todos los Estados para lograr mejores condiciones, “cuando estamos hablando de un marco de acuerdo plurianual, y debe tener una mirada dirigida al conjunto que sobrepase los intereses de los Estados”.
Y advertía esta tertuliana que “no sería la primera vez que un proyecto de integración federal como la UE fracasa porque las partes no están de acuerdo en poner los recursos económicos para que salga adelante”. “De eso estamos hablando cuando racaneamos así”, se quejó.
Luis Basets señaló que es la primera vez que disminuye el presupuesto a pesar de los esfuerzos por propugnar políticas de estímulo de los países del sur y Francia., cuando él cree que “Europa no necesita un presupuesto para estimular la economía coyunturalmente, sino que necesita mucho más para hacer un sistema bancario único, unas políticas comunes de trabajo, competitividad, mercados, etc”.
Elena Pisonero puso de manifiesto que “lo que defienden los países a nivel nacional entra en contradicción con el proyecto europeo, “Todo el mundo quiere trincar para su casa y se olvida del proyecto común”.
Urrea insistió el reproche que hacía su compañera: “Se mantiene el debate de los contribuyentes netos y los perceptores netos; el que aporta más siempre estará en términos de decir que se cansa de contribuir para que los demás perciban. Me gustaría que se superara este debate, porque cuando se diseña un proyecto común, con unas diferencias estructurales, como sucede en la UE, no podemos distribuirnos en contribuyentes y perceptores netos.