Todos miman a Rajoy, pero El País no se fía

Los diarios conservadores se debaten hoy entre las alabanzas a Rajoy y los elogios a la selección española de baloncesto, campeona de Europa, bueno salvo La Razón que lo tiene claro y pasa del “yo soy español, español, español…», para proclamarse de nuevo el rotativo más marianista de todos, al dedicar la foto gigante de su portada al líder del PP arropado por la plana mayor de su partido en la presentación de su autobiografía “En confianza”. Además, el diario que dirige Francisco Marhuenda, que está lanzado desde el domingo, destina el editorial principal a hacer publicidad al libro y a Mariano, algo que no extraña si se tiene en cuenta que la obra ha sido editado por Planeta. ¡Qué pillines, así matan dos pájaros de un tiro!

La cosa de la presentación debió ser tan empalagosa que, según El Mundo “aquello lo que parecía era una procesión mariana”. “Con flores a Mariano” titula el diario de Pedrojota que lo define como un gran acto social previo a la victoria por todos anunciada, en la que estaban todos “el glamour y la fortuna; el cine y la cátedra…”. Sin embargo, y para no perder el norte de lo que hay detrás de tantas muestras de cariño Lucía Méndez escribe el artículo “El poder del amor (o viceversa)”, en el que viene decir que detrás de esta “auténtica fiesta del amor. En torno al autor y en torno al PP mismo” lo que hay es un partido de la oposición que “festeja su victoria por adelantado, epatando al adversario con salones llenos de políticos relevantes que buscan un puesto, aunque sea de subsecretario, con empresarios de postín y banqueros que no quieren dejar de estar con el futuro poder”.

El País, lógicamente, no cae rendido a los pies de Mariano y las ‘flores’ se convierten en críticas a algunas de las medidas fiscales que anunció ayer que adoptaría en caso de llegar al Gobierno. Y es que el de Prisa cree que las propuestas tributarias no responden a la envergadura de la crisis. Y deja caer que Rajoy “ o guarda en la manga otras que no desea mostrar o, si no, se diría que ignora la dimensión de la crisis que tendría que gestionar de llegar a La Moncloa”. Pues, estamos apañados.

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