Pedrojota se alegra de las desgracias de Rubalcaba y sufre por Aguirre

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Pedrojota se alegra de las desgracias de Rubalcaba y sufre por Aguirre

Está claro que cada cual cuenta la feria según le va, y en el caso de los diarios, la ‘feria’ se cuenta según les va a los políticos de la ‘cuerda’ del rotativo en cuestión. Por eso, no es de extrañar que Pedrojota Ramírez ponga el grito en el cielo, y en la portada, por la “mala educación de los educadores” y se enfade por los carteles “ofensivos para Aguirre”, que se exhibieron en la manifestación de profesores de ayer contra los recortes promovidos por la Comunidad de Madrid, unas pancartas en las que se parodiaba “ a la presidenta como un moderno Saturno devorando a sus hijos”, pero en los que la lideresa lo que engullía no era a sus vástagos sino a la educación infantil.

Y si el director de El Mundo ve fatal que se metan con Esperanza, le parecen de perlas las desgracias de Rubalcaba, de quien dice que desde que fue elegido candidato del PSOE “cada día es peor que el anterior, aunque mejor que el siguiente”. Pedrojota hace un listado de los males que está sufriendo Rubalcaba y entre ellas destaca las diferentes versiones que el Gobierno está dando sobre el número de contribuyentes al que afectaría el nuevo Impuesto de Patrimonio pero también los “tropiezos” a la hora de elaborar las listas electorales, ya que al contrario de lo que dice el Evangelio “la mies es poca y los obreros muchos”.

El resto de los diarios conservadores, Abc y La Razón también hacen sangre con las «tres versiones de un mismo tributo”, como titula el de Vocento en su portada. Pero El País arregla el desaguisado. Ni para ti ni para mi. Ni 90.000 contribuyentes como calculó Blanco, ni 200.000 0 300.000 como dijo Rubalcaba. El de Prisa dice que es un confusión y que hablaban de conceptos distintos y explica que el impuesto afectará a un máximo de 150.000 personas citando como fuentes a los técnicos de Hacienda que son los que saben de lo que hablan porque son los que están realizando los cálculos. O sea solución salomónica y todo arreglado.

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