Varias de las personas que planificaron la protesta del 6 de enero en Washington se empezaron a comunicar con investigadores del Comité Selecto de la Cámara de Representantes y revelaron que algunos miembros del Congreso estaban involucrados en la organización de la protesta impulsada por el entonces presidente Donald Trump (2017-2021) contra la ratificación de los resultados de la elección presidencial 2020.
Las fuentes dijeron que participaron en «docenas» de sesiones informativas antes de los disturbios del 6 de enero, dice el artículo de Rolling Stone.
«Recuerdo a (la diputada) Marjorie Taylor Greene específicamente (…) Me acuerdo de hablar con una docena de otros miembros en algún momento u otro o con su personal,» dijo una de las fuentes citadas en la nota.
Asimismo, relataron que interactuaron con la administración de Trump, entre ellos el ex jefe de personal de la Casa Blanca, Mark Meadows, quien según las fuentes tuvo la oportunidad de prevenir los hechos violentos.
Por otra parte, las fuentes revelaron que se reunieron con varios congresistas, como Paul Gosar y Andy Biggs de Arizona (suroeste), Lauren Boebert de Colorado (oeste), Mo Brooks de Alabama (sureste), Madison Cawthorn de Carolina del Norte (sureste), y Louie Gohmert de Texas (sur).
El 6 de enero, un grupo de simpatizantes de Trump entró al Capitolio estadounidense para protestar contra los resultados de la elección presidencial 2020, por considerarla fraudulenta.
Las autoridades acusaron y arrestaron a más de 600 personas por participar del evento, mientras que el Congreso designó a un Comité Selecto para investigar los hechos.
Al menos cinco personas fallecieron durante los disturbios.