“No vamos a hacernos una foto con la patronal inmobiliaria porque no podemos esperar ninguna solución de los culpables del problema. No se invita a las tabaqueras a diseñar la Estrategia Nacional contra el cáncer y no se invita a los rentistas a discutir la política de vivienda”.
Así lo defienden en un comunicado, en el que señalan que “esta propuesta de reunión demuestra que Pedro Sánchez ha hecho oídos sordos al mensaje de las calles de Madrid, Valencia y Alicante”. “Las patronales bancarias y de la construcción llevan 40 años dirigiendo las políticas de vivienda en España”, afirman, “y escucharles solo servirá para engordar sus beneficios y empobrecer más a la mayoría social”.
En su opinión, el jefe del Ejecutivo “tiene que decidir”. “O se enfrenta a los rentistas que han multiplicado impunemente los precios del alquiler, o les sigue dando vía libre con políticas cosméticas”, sostienen. Dicho esto, reiteran sus críticas al bono joven al alquiler. Para los sindicatos esta ayuda económica “terminará en los bolsillos de los rentistas”. Además, advierten de que el “decreto fake” sobre alquileres de temporada, “un mero registro informativo sin efectos reales”, ponen de manifiesto “su intención de no cambiar nada”.
Dimisión de la ministra de Vivienda
“Esta reunión pretende ser, además, un lavado de cara a la nefasta gestión de este Gobierno en materia de vivienda justamente el día antes de que la ministra (Isabel Rodríguez) comparezca en el Congreso para rendir cuentas por ello”. Según los sindicatos de inquilinas, “ahora que las calles piden su dimisión, quiere una foto con las inquilinas”. “Vamos a ser muy claras”, aseguran, “de Isabel Rodríguez solo esperamos su dimisión”.
Las organizaciones de inquilinas alertan de que la situación actual es “límite” y “no admite medidas cosméticas ni fotos de familia”. De ahí que hayan insistido en la necesidad de bajar los alquileres el 50%, recuperar las viviendas vacías, turísticas y de temporada para su uso residencial, la “desarticulación” de todo grupo de desokupación y el “cese de toda actividad especulativa”.
“El Gobierno no ha querido entender el mensaje, pero los sindicatos de inquilinas lo repetiremos en las calles”. Así avanzan nuevas movilizaciones. En concreto, en Málaga el 9 de noviembre y en Barcelona el 23 de noviembre. “O bajan los precios, o huelga de alquileres”, avisan.