El banco que preside Ana Botín se ha dejado este martes un 5,97% en el parqué, hasta los 3,33 euros, liderando las caídas del Ibex 35, que ha cerrado la sesión con una depreciación del 1,23%. La entidad corrige de este modo las fuertes subidas que se había anotado en el acumulado anual —del 26%— hasta la jornada de ayer, a pesar de que sus resultados han batido previsiones gracias a la positiva evolución del negocio en Europa, que ha compensando el flojo trimestre en otros mercados, como Brasil y EEUU.
En Brasil, el principal mercado del Santander, el beneficio neto cayó un 25% debido a un aumento de los costes impulsado por la inflación y una caída del margen de intereses. En EEUU, el descenso fue del 48,5%, debido al aumento de los costes de financiación en el negocio automovilístico.
En la presentación de sus resultados trimestrales, Santander ha señalado que sin tener en cuenta el impacto del impuesto temporal sobre los ingresos de la banca, que implicó un desembolso de 224 millones de euros, su resultado neto hubiera sido de 2.795 millones de euros, lo que supondría un avance del 10%.
En comparación con el trimestre anterior, Banco Santander experimentó una salida de depósitos de 10.773 millones de euros en el periodo que fue de enero a marzo, por lo que se situaron en 998.949 millones de euros. No obstante, la entidad ha subrayado que los problemas de los bancos medianos de Estados Unidos y Credit Suisse vividos en el mes de marzo «no aplican» a la entidad.
Las presiones bajistas en Santander se han contagiado al resto de bancos. Así, el Sabadell se ha dejado un 4,41%; BBVA, un 2,44%; Caixabank, un 1,69%; Unicaja, un 1,63%; y Bankinter, un 0,25%.